Por medio de mesas técnicas, realizadas en todo el territorio de La Guajira, se creó un documento que pretende mejorar la resolución de conflictos entre los clanes de la zona: el Mandato de Autoridad Moral del Pueblo Wayúu.
A finales de octubre el Gobernador de La Guajira (E), José Jaime Vega, participó en la socialización del Documento Mandató de la Autoridad Moral del Pueblo Wayúu (Pütchikalü), en compañía de la secretaria de Asuntos Indígenas, Eyssa Rodríguez, el Representante Adjunto de la Oficina en Colombia del Alto Comisionado de Naciones Unidas para los Derechos Humanos, Juan Carlos Monge, y miembros de la Junta Mayor de Palabreros y del Consejo Superior de Palabreros.
La Junta Mayor de Palabreros y el Consejo Superior son organizaciones sin ánimo de lucro que prestan apoyo y tienen reconocimiento en todo el departamento de La Guajira. La Junta está conformada por 37 palabreros del territorio, y un grupo interdisciplinario de unos 20 jóvenes, todos de la etnia wayúu. El Consejo Superior, por su parte, está conformado por 25 palabreros, según explica Rodríguez.
Desde el mes de junio de 2021, la Gobernación de La Guajira, a través de su Secretaría de Asuntos Indígenas, hizo el llamado a la ONU (Organización de las Naciones Unidas) para que apoyara y asistiera técnicamente la formulación de alternativas para la gestión y transformación no violenta de los conflictos dentro y fuera de los clanes, que para ese momento sumaban más de 200 en todo el territorio guajiro.
Rodríguez comenta que “la Junta y el Consejo, de la mano de la Organización de Naciones Unidas y la Secretaría de Asuntos Indígenas, en el tema específico de derechos humanos, empezaron a hacer unas mesas técnicas en cuanto a la intervención de terceros dentro del territorio, por esa lucha constante de los derechos de los pueblos indígenas, como el wayúu, enmarcada dentro de la Constitución el artículo 46 que habla sobre la jurisdicción especial indígena”.
Desde ese entonces, y hasta la fecha, la Gobernación, el Consejo Superior de Palabreros, la Junta Mayor Autónoma de Palabreros y la ONU DDHH llevaron a cabo encuentros mensuales de trabajo conjunto, de discusión y construcción colectiva de lo que, en palabras de los mismos Pütchi pü (palabreros),debía ser una herramienta que trascendiera la transformación de los conflictos y se convirtiera en una estrategia y hoja de ruta para la prevención de dichos conflictos.
Estos tendrían como base fundamental el Sistema Normativo Wayúu, entendido este como el conjunto de normas, principios, procedimientos y ritos que regulan y/o guían la conducta social y espiritual de los miembros de la Nación Wayúu, en cuya aplicación social se recrea la palabra para la gestión de justicia y se formalizan los rituales del saber ancestral, que integran los fundamentos de vida social, espiritual y mitológica.
“¿En qué se diferencia este sistema? En que goza de una jurisdicción especial protegida por normativas tanto nacionales como internacionales. Se ha reconocido como un sistema propio el cual tiene que ser conservado y preservado, por las diferentes instituciones. Por eso se habla del sistema ordinario y del sistema de jurisdicción especial indígena”, comenta Rodríguez.
El Sistema Normativo Wayúu garantiza el ejercicio pleno del Derecho Wayúu, concebido como Ley del Origen Común, así como el cumplimiento de los deberes que corresponden a cada individuo al interior de la institución social y cultural de los linajes maternos (Ei’rukuu).
“Es un sistema que se basa en principios, procedimientos y rituales tanto de lo social como lo espiritual dentro de nuestra cosmovisión Wayúu. El sistema educativo está reconocido como Patrimonio Inmaterial de la Humanidad y le da el valor a nuestro Pütchi pü o nuestro palabrero, por la experiencia que tienen dentro del territorio y ante la solución de conflicto”, aclara Rodríguez.
En un primer momento, estos encuentros fueron acompañados de la institucionalidad, representada por la Fiscalía General de la Nación, Policía, Ejército, ministerio público, alcaldías municipales y la academia.
Con estos insumos, reunidos a través de varios encuentros, se llegó al documento: Mandato de la Autoridad Moral de la Palabra del Pueblo Wayúu, que a su vez contiene los principios básicos para la intervención de terceros en el territorio ancestral y tradicional del pueblo. Entendiéndose por terceros las instituciones, organizaciones y empresas nacionales e internacionales, entre otros.
“Este mandato es como un documento donde el pueblo pide, ‘cuando entres a nuestro territorio, conóceme primero, mis costumbres, mis leyes, mis ritos, mis principios’. Son los wayúu explicando cómo se debe ingresar al territorio, quién es una autoridad, quién es un palabrero. Todas esas definiciones buscan que la persona que vaya a intervenir, ya sea público o privado, tenga conocimiento básico de las costumbres del lugar”, señala Rodríguez.
El documento fue socializado con autoridades tradicionales y ancestrales del pueblo wayúu en los municipios de Uribia, Maicao, Manaure y Riohacha, enriqueciendo los principios con los aportes y observaciones, resultado de estos encuentros.
Como dice la Secretaria, “no fue algo que se realizó solamente en reuniones del casco urbano. Se llevó y trabajó en cada municipio, para que las autoridades hicieran aportes al mandato, que en sí fue construido por todo el pueblo. Por eso se le llama Mandato Moral y Espiritual del pueblo Wayúu”.
“Como Gobierno Departamental celebramos que hoy se entregue y socialice este documento que nos permitirá trabajar en beneficio y de la mano con nuestros hermanos Wayuu, el cual siempre ha sido una prioridad para nuestra administración y hoy se ve materializado en este hecho histórico” señaló el Gobernador.