Somos Martina no solo diseña y vende productos más ecológicos, sino que enseña a fabricarlos y educa frente las problemáticas sexuales y mensturales de regiones vulnerables del país.
El 8 de marzo de 2019, y bajo la premisa de hacer calzones absorbentes para personas menstruantes, Juliana Villegas decidió lanzar al mercado Somos Martina.
“Siempre pensé en tener una menstruación mucho más sostenible, intenté usar la copa menstrual pero jamás me adapté. Luego de un viaje descubrí que existían los calzones absorbentes y, años después, estudié en España Fashion Product Management y entendí la importancia de la moda sostenible. Pensé que en Colombia necesitábamos hacer el cambio a productos menstruales ecológicos porque entendí el impacto que esto tiene en el mundo», cuenta Juliana.
Cuando culminó sus estudios, en 2018, regresó a Colombia y conoció a Laura Naranjo, la diseñadora textil con quien empezó este proyecto en el que los seis primeros meses fueron de prueba y error, y tocando puertas de fábricas que quisieran hacer los calzones con la calidad que lo requería.
“Hicimos una investigación con varias marcas extranjeras para entender cómo podíamos hacer un buen producto local pero también muy distinto a ellos, algo único. Productos latinos en ese momento casi no existián, así que podemos decir que fuimos pioneras en este mercado”.
Juliana cuenta que con el tabú que tiene el país frente a la menstruación y, sobre todo, a otro tipos de productos como los calzones absorbentes, fue un proceso de educación y concientización.
“La gente nos preguntaba todo el tiempo al principio sobre cómo funcionaba, qué si se sentía como un pañal, que si había algún riesgo de que el sangrado se traspasara. Sin embargo, durante la pandemia varias clientas eligieron este como el mejor momento para usarlo y se dieron cuenta de que funcionaba y era un producto ecológico”.
Los calzones de Somos Martina cuentan con tres capas diseñadas con algodón super absorbente, no tienen costuras que se marquen con la ropa y cuentan con varios tipos de absorción para usarlos durante varias etapas del ciclo menstrual.
Luego de tener una marca establecida, empezaron a desarrollar uno de sus pilares más importantes: talleres de confección de toallas higiénicas reutilizables que dictan en zonas vulnerables con los que han logrado llegar a departamentos como Antioquia, Chocó y Amazonas.
“En 2021 comenzamos. El primer taller fue en Arusí, lo dictamos a 100 mujeres de las que aprendimos cómo funciona su comunidad y su cultura para poder también ayudarlas. El segundo fue en Quibdó, Chocó, y también logramos llegar a Amagá, Antioquía, y a la Guajira, donde pudimos confeccionar 2.500 toallas higiénicas para 1.200 mujeres», agrega.
Juliana cuenta que ya no concibe a Somos Martina como una marca, sino como parte de un cambio social que necesita resonancia, sobre todo, en comunidades apartadas del país.
“El recibimiento por parte de estas mujeres ha sido muy positivo, siempre nos cuentan sus historias y anécdotas y los mitos alrededor de la menstruación y la sexualidad. Fundaciones locales nos ayudan para llegar a los lugares y nos dan un contexto: nos cuentan sus creencias para entenderlas y apartir de esto empezar a generar un cambio”.
Como parte de su último aniversario, la marca lanzó varios testimonios de mujeres que ya hacen parte de la comunidad “martinas” y presentó una nueva colección que cuenta con “toda una paleta de pieles porque queremos celebrar nuestra diversidad de colores y tamaños sin olvidar que todas somos hermanas”, concluye.