‘PaZame el Balón’: la fundación que construye paz en Nariño a través del fútbol

Durante dos años, un grupo de voluntarios en Magüi Payán, un municipio de Nariño, ha atravesado ríos y carreteras remotas hasta adentrarse en lo más profundo del departamento con un objetivo común: llevar esperanza, educación y recreación a más de 2.200 niños en 14 veredas.

El viaje de los 100 voluntarios de PaZame el Balón’ comienza con un recorrido de más de cinco horas por el Río Patía, hasta llegar al casco urbano del corregimiento de Lomas de Aupalla. Desde allí, los instructores se embarcan en motos otras dos horas hasta llegar a la vereda La Loma, rodeada de selva y casas rurales, donde los esperan con ansias más de 125 niños.

‘PaZame el Balón’ es una fundación creada en 2022 con el objetivo de llevar jornadas de fútbol y estudio a poblaciones infantiles vulnerables en Nariño y, de esta forma, minimizar los impactos que el conflicto armado tiene en los menores.

Los voluntarios de 'PaZame el Balón', además de las clases de fútbol, también enseñan a los niños sobre el cuidado, identificación y manejo de minas antipersona. I Foto Cortesía Fundación PaZame el Balón.

Yisela Angulo, quien inició como voluntaria en 2022 y ahora es instructora lúdica, recuerda que todo el proyecto comenzó como un trabajo en conjunto entre los más de 20 líderes comunitarios de las distintas veredas del departamento.

Lo primero que hicieron fue visitar los sectores rurales para reunir a los niños alrededor del fútbol. Con el tiempo, también notaron que podían aprovechar su presencia para dictar clases de seguridad, derechos humanos e, incluso, para mejorar la infraestructura de las instituciones educativas donde recibían clases. Todo con el fin de alejarlos de la violencia y minimizar el contacto e ingreso a grupos al margen de la ley. 

Luego de varios meses desde su llegada -una vez confirmaron que el fútbol despertaba gran interés en los niños y la población en general-, decidieron ampliar el alcance de sus labores y, en las siguientes visitas, entregaron kits escolares para incentivar a que los chicos pudieran seguir con sus clases

En 2023, la fundación recibió el premio Franco-Alemán de Derechos Humanos "Antonio Nariño" por su labor rescatando a niños y jóvenes de la violencia. I Foto Cortesía Fundación PaZame el Balón.

Fue en ese momento en el que también notaron que las propias instituciones presentaban graves problemas técnicos y de conservación de la infraestructura. Según datos del Ministerio de Educación, en Magüi Payán existen 38 centros de estudio rurales que brindan servicio a 1.800 niños. Sin embargo, muchas de estas instituciones presentan riesgos locativos graves que dificultan la enseñanza digna. 

Por eso, la Fundación, con ayuda de la comunidad e involucrando también a los niños, comenzó a realizar jornadas de restauración que perduran hasta hoy. 

El fundador del todo este proyecto es Francisco Barreto. Fue él quien notó que el fútbol y el restaurar centros de estudio era una estrategia poderosa para minimizar el riesgo de que los niños ingresaran a grupos armados. 

Restauración de la infraestructura educativa y capacitaciones sobre seguridad

Ya son 231 los niños beneficiados con las instituciones educativas restauradas gracias a los trabajos de la Fundación PaZame el Balón. I Foto Cortesía PaZame el Balón.

Debido a las difíciles condiciones del territorio en materia de seguridad, uno de los principales temas que abordan durante las jornadas educativas es el enseñar a los niños a identificar minas antipersona, un conocimiento práctico que, aunque lamentable, comentan, termina siendo vital a para salvar vidas en territorios como Nariño

Este departamento, ubicado en el suroeste del país, según el portal Acción Contra Minas del Gobierno nacional, figura como el tercero con más víctimas de estos artefactos en Colombia.

“Cuando vamos a los entrenamientos, aprovechamos el espacio y le enseñamos a los niños cuáles son esas señales, donde se pueden encontrar una mina y cómo deben ellos asumir ese momento para evitar que explote o que genere algún daño”, comenta Yisela. 

Las enseñanzas alrededor de las minas antipersonas son vitales para salvar vidas en este territorio que es uno de los más afectados por este crimen de guerra en el país. | Foto: cortesía Fundación PaZame el Balón.

A pesar de la distancia y las dificultades de seguridad, los 100 voluntarios de la Fundación ‘PaZame el Balón’ recorren áreas de Nariño donde el Estado no tiene presencia. 

Su labor refleja cómo las comunidades, a través del deporte, la educación y el trabajo comunitario para restaurar la infraestructura local, han creado iniciativas poderosas para mostrarle a la niñez local que un futuro diferente y esperanzador, lejos de la guerra, sí es posible.