En el último año, 57.000 personas del departamento salieron de esta condición de vulnerabilidad. Además de la reactivación económica, las estrategias se enfocaron en poblaciones como las madres cabeza a hogar, los jóvenes y los adultos mayores.
Entre 2020 y 2021 la pobreza extrema en Risaralda pasó del 9,9 % al 4,8 %, frente al promedio nacional de 12,2 %, convirtiéndose así en el departamento con la menor tasa de personas que sobreviven al día con menos de 1,90 dólares (unos 7.500 pesos). El resultado se obtuvo gracias a las estrategias que se han implementado teniendo como ejes la vacunación contra la covid-19 y la reactivación económica.
Sobre este logro, el gobernador de Risaralda, Víctor Manuel Tamayo Vargas, explicó que “es el resultado de un esfuerzo entre el sector público y el privado. El departamento de Risaralda aparece en primer lugar a nivel nacional en reducción de la pobreza extrema. Es supremamente importante y es el reflejo de que vamos en el camino correcto, apostándole a que muchas familias sean beneficiadas de los programas nuestros”.
En cuanto a esa alianza entre sectores, Tamayo explicó que, desde el sector privado, se hizo con la reactivación económica y desde el público con “los diferentes programas y desde las diferentes inversiones en materia de obra pública”, añadiendo que la meta es “identificar a esos sectores en la población que más requieren de nuestra ayuda”.
También se resalta la disminución de la pobreza monetaria, es decir, cuando una persona tiene un ingreso mensual inferior a $161.099. Risaralda, con el 29,8 % de sus habitantes en esta situación, ocupa la quinta posición frente al índice nacional que fue de 39,3 %. Esto significa que 57.000 personas salieron de esta condición de vulnerabilidad durante 2021.
Estos datos fueron dados a conocer por el Departamento Administrativo Nacional de Estadística (Dane) a finales de abril. “De 21 millones de personas en situación de pobreza monetaria en 2020, con una salida de 1.400.000 personas en 2021, comparado con el referente prepandemia, el país todavía cuenta con 2.151.000 personas en situación de pobreza monetaria”, explicó la entidad.
Las estrategias para frenar la pobreza
El secretario de Planeación de Risaralda, Mauricio Vega, explica que este avance en su departamento se debe, en buena parte, al “liderazgo que se estableció con la vacunación (contra la covid-19), que permitió la reactivación económica, dándole paso a la apertura de la actividad empresarial”.
En ese sentido, Vega exalta la importancia de que, en el departamento, haya un trabajo articulado “con los diferentes sectores para reducir brechas sociales, que es un propósito que tenemos en nuestro plan de desarrollo: Sentimiento de Todos”.
Otro punto que el funcionario resalta como relevante para la consecución de este resultado es la articulación entre las Alcaldías de los municipios risaraldenses, la Gobernación del departamento y el Gobierno nacional, la cual califica como una “triada exitosa”.
Un ejemplo que da sobre ese trabajo mancomunado, por el que también explica la reducción en los índices de pobreza, es el desarrollo de obras como “el hospital de alta tecnología en Pereira, que potencializará, economizará y cubrirá el tema de la salud en nuestro departamento. Todo el Eje Cafetero y el norte del Valle del Cauca tendrá un hospital de alto nivel”.
Apuesta por los sectores vulnerables
“Hemos hecho un esfuerzo puntual de reactivación económica con madres cabeza de hogar, con personas de la tercera edad y con los jóvenes en primer empleo”, señala Vega para explicar cuál ha sido el trabajo que se ha adelantado en los últimos meses de cara a la disminución de la pobreza en Risaralda.
También habla de cómo en el plan de desarrollo, liderado por el gobernador Tamayo, se ha tenido un enfoque social, también “pensando en las comunidades indígenas, que son las más vulnerables en el departamento y a las que estamos apoyando en diferentes temas, como educación”.
En esa línea, Vega aclara que existen otros indicadores de su departamento que, a su juicio, sirven para entender el panorama de la disminución de la pobreza en Risaralda. Por ejemplo, es el cuarto departamento más competitivo de Colombia, detrás de Bogotá, Antioquia y Santander. O que es el departamento del país con mayor acceso a internet, con un 72,8 % de conectividad frente al promedio nacional de 60,5 %.
A la larga, concluye el secretario de Planeación, se trata de “una apuesta por los temas sociales, un compromiso con todas las poblaciones focalizadas y un esfuerzo grande de reactivación económica”.