260 colombianas hacen parte del Círculo de Creativas, una red de apoyo que busca visibilizar el talento de las mujeres y cambiar el contexto de desigualdad que enfrentan en la industria actual.
Hace 2 años, seis mujeres interesadas en desmontar y combatir las causas detrás de la desigualdad de género en la industria creativa sentaron las bases para hacer realidad el Círculo de Creativas Colombia, una comunidad de apoyo entre mujeres que busca unir, visibilizar, potenciar e inspirar a esas 260 integrantes que “cuando se reúnen pasas cosas chimbas”.
En Colombia, la idea del Círculo comenzó a rodar por parte de varias mujeres que notaban la ausencia de otras creativas en el medio. Y también por iniciativas como la de Valeria Silva, quien dictaba conferencias a mujeres estudiantes de publicidad a punto de graduarse, sobre la brecha en cuanto a posibilidad de ascenso, ingresos y oportunidades laborales de las mujeres frente a los hombres en cargos creativos.
Pero en Chile el Círculo ya era una realidad. Michelle Guichard, la entonces directora creativa de la agencia británica de publicidad Ogilvy & Mather y una de las fundadoras del Círculo chileno, se acercó a varias creativas colombianas de diferentes agencias para extender la invitación de ‘abrir una sede’ del proyecto en Colombia, entre esas Valeria.
Así fue como, poco a poco, otros Círculos comenzaron a sumarse, pues en varios países de Latinoamérica estaba latente la necesidad de poner el tema de discusión en la agenda pública. Se extendió a otros 10 países además de Chile y Colombia: Costa Rica, Ecuador, Brasil, Perú, Bolivia, Panamá, México, Puerto Rico, El Salvador y Argentina.
Una mujer ‘creativa’ puede ser copy, diseñadora web, diseñadora gráfica, directora de arte o community mannager. Una de las fundadoras del Círculo, Valeria Silva, por ejemplo, es Copy en Delirio & Twain, agencia española. Ella recuerda que las primeras vueltas fueron como un ‘voz a voz’ en el que que tuvieron que buscar a esas creativas que, como ella, querían conocer ese talento femenino invisibilizado dentro de esta industria.
“Cuando me reuní con las otras cinco mujeres decidimos que íbamos a hacer esto real. Todas teníamos las mismas preocupaciones e intención. Nuestra primera ‘convocatoria’ fue tan exitosa que nos cerraron el primer perfil porque tuvo mucha interacción en poco tiempo. Casi 1.500 followers”, comenta Valeria, quien entonces entendió que el malestar se extendía más allá de solo ellas seis. Y que tenían todo para crear una comunidad.
Primera vuelta: Las cifras reafirmaron la necesidad de ‘poner a rodar el círculo’
Cuando las seis mujeres se reunieron, notaron que sus impresiones alrededor de la industria creativa eran las mismas: los modelos a seguir eran hombres, habían más mujeres en cargos ejecutivos o administrativos que creativos y, además, que en las agencias, el trabajo femenino casi que «pasaba de agache».
El Círculo de Creativas Colombia se ha convertido en un espacio donde las 260 mujeres ya pueden reconocerse entre sí y rotarse las ofertas laborales cuando hay vacantes disponibles pues en el círculo han entendido que no son competencia. Pero no siempre fue así.
“Uno de los mitos más comunes de los contratistas a la hora de emplear hombres era que no había creativas mujeres. Nosotras hicimos un censo y encontramos muchas copys, diseñadoras web o gráficas, etc, pero en los porcentajes de cargos de liderazgo eran muy bajos, a veces nulos”, comenta Laura Ballesteros, comunicadora social y redactora publicitaria. Para ella, el problema no es falta de talento, sino la falta de visibilización.
El Círculo de Creativas Colombia hace parte del Círculo Latam, donde se agrupan los proyectos de los 9 países latinoamericanos, incluyendo Chile, donde todo comenzó. Ese gran círculo, comentan, les ha permitido darse cuenta que, aunque los estereotipos erróneos pueden cruzar fronteras, los miedos también pueden cruzarse con esa guía y apoyo entre mujeres.
Los cuatro pilares sobre los cuales funcionan los Círculos en todos los países son unir, visibilizar, potenciar e inspirar. Es con base en ellos que las mujeres construyen sus propuestas, que van desde charlas con mujeres que están en cargos altos creativos hasta sesiones de elaboración de portafolios con asesoría de expertos.
Uno de sus argumentos para organizar las charlas es que, según ellas, en la industria creativa por lo general no sabe quiénes son las mujeres que hacen grandes cosas a nivel mundial. En Ad Confessions, las charlas que organizan, lo que buscan precisamente es hablar con esos creativos sobre las herramientas que las ayudaron a materializar sus ideas y alcanzar los puestos que ocupan.
Por otro lado, con respecto a los portafolios, Catalina Parra, diseñadora gráfica y directora de arte en Sancho BBDO, comenta que ese fue uno de los inconvenientes más significativos a la hora de tener que enfrentarse al mercado laboral como creativa pues, en su paso por la universidad, nunca recibió instrucciones detalladas de cómo armar uno.
Para alguien que está en este mundo, el portafolio significa la hoja de vida con la que evidencia el estilo, cantidad y calidad de sus proyectos. Un portafolio bien armado le permite al profesional ser seleccionado para mejores puestos. “En este proyecto resolvemos cosas que nosotras mismas vivimos”, comenta Catalina.
Segunda vuelta: El Círculo como voz de autoridad dentro de la industria creativa
Laura Arcila, directora de arte y otra de las seis fundadoras, cuenta que a veces reciben invitaciones para enviar a mujeres talentosas a participar como jurados, otro de los logros que ha logrado el círculo en su segundo pilar, visibilización. Para ella, el simple hecho de tener un colectivo con tantas mujeres creativas crea un eco fuerte hacia la industria, al tiempo que permite desmitificar que no hay mujeres preparadas para ocupar las vacantes.
El Círculo quiere lograr que los hombres y mujeres se reconozcan como iguales dentro de la industria creativa. Uno de sus proyectos a futuro es poder crear una página web donde se pueda facilitar la búsqueda de creativas filtrando por perfiles, años de experiencia, ubicación, entre otras variables.
El impulso de 260 mujeres con la determinación de cambiar la industria creativa colombiana hace que el Círculo gire con más fuerza cada día.