
En Villavicencio, 50 docentes y 150 estudiantes darán clases de lectura y escritura para adultos
Un programa impulsado por la Alcaldía de Villavicencio busca, en dos años, reducir a la mitad la tasa de analfabetismo de la ciudad.
Un programa impulsado por la Alcaldía de Villavicencio busca, en dos años, reducir a la mitad la tasa de analfabetismo de la ciudad.
El safari llanero se convirtió en un plan turístico liderado por vaqueros, que, aunque antes cazaban animales, hoy se dedican a conservarlos. Estas son algunas de las especies de mamíferos, reptiles, anfibios y aves que puede encontrar viviendo esta experiencia en las llanuras de Casanare.
Como herramienta de desahogo, como ancla a su región y como mecanismo de construcción de memoria, la música llanera ha acompañado a Berzabeth Martínez durante toda su vida.
Debido a las piezas arqueológicas encontradas durante la construcción del acueducto de Puerto Santander en 1990, se creó un museo que resguarda y custodia el legado cultural que se conoce hasta el momento de la extinta comunidad precolombina guayupe.
Habitantes de la comuna dos de Villavicencio cambiaron la guerra entre pandillas por una ruta turística que llega a la reserva natural Buena Vista.
En Puerto Carreño, Vichada, la iniciativa Woman Fish asocia por primera vez a las mujeres cabeza de hogar que encuentran en la pesca artesanal el sostenimiento de su familia y un aporte a su comunidad.
Una organización comunitaria de mujeres que el conflicto armado alguna vez extinguió, revive en Villavicencio para combatir el analfabetismo de sus integrantes y ofrecer herramientas para tramitar su pasado.
Productos como aceites o snacks, hechos de la planta de sacha inchi, se convirtieron en una opción para la sustitución de cultivos y el cuidado del medioambiente.
En los jardines de sus casas, mujeres afrodescendientes de Arauca cultivan y producen plantas que transforman, con el conocimiento heredado de sus antepasadas, en aceites, infusiones y pomadas medicinales.
El fruto del moriche, palma usada para fabricar hamacas, mochilas, sombreros y canastas, empieza a usarse en las mesas del Vichada como parte de un proyecto productivo campesino.