Desde 1970, cada año el 22 de abril se conmemora el Día Internacional de la Madre Tierra como una forma de generar conciencia sobre la importancia del cuidado del planeta. En este día, Colombia Visible le trae cinco voluntariados con enfoque ecológico a los que puede sumarse.
Amigos que cuidan los cerros de Bogotá
Amigos de la Montaña se define como una “comunidad de ciudadanos que busca un feliz, educador y respetuoso encuentro entre los Cerros Orientales y los habitantes de Bogotá”. En 2009, un grupo de 26 habitantes de Chapinero, que viven cerca al sector de la quebrada La Vieja (uno de los principales afluentes de agua de los cerros) decidió unirse con un propósito.
Se dieron cuenta de que el alto flujo de visitantes, a los 25 senderos que hay en la cuenca de la quebrada, estaba contaminando su cauce. Por eso, se unieron para promover caminatas responsables, en las que se hacen jornadas de limpieza.
“Buscamos cambiar la mirada que los habitantes de la ciudad y las instituciones tenemos de esas montañas, principal patrimonio de Bogotá, promoviendo su protección y su uso público respetuoso como oportunidad de encuentro con la naturaleza para mejorar la salud física, mental y emocional y la calidad de vida de todos”, explican desde la organización.
Recoger basuras mientras se hace ejercicio
Desde 2018, Tribu Aluna promueve el ‘plogging’ en Medellín. El plogging (cuyo nombre viene de la unión de ‘picking up’ y ‘jogging’) consiste en trotar mientras se recogen desechos arrojados en el suelo. En el caso de Tribu Aluna, también realizan sesiones de yoga y meditación al final de cada jornada. Hasta el momento, han recogido más de 1.000 kilos de desechos con el apoyo de 400 voluntarios.
“La falta de interés y consciencia ambiental tiene que ver con que estamos desconectados de la naturaleza y no reconocemos que somos parte de ella. Eso es algo que se entiende mejor afuera que en un salón de clases. Hay que salir, untarnos de tierra, sembrar”, explicó a la WWF David González, uno de los fundadores de la iniciativa.
Salvar los bosques de Montes de María
“No podemos vivir con la idea ingenua de que los bosques siempre van a estar allí. Tenemos que actuar ya y acabar con las malas prácticas que vienen generando problemas como la crisis climática”, dice Manuel Valdez, de Sembrando Esperanza, un grupo de jóvenes en Montes de María, entre los departamentos de Sucre y Bolívar.
El trabajo que realizan se centra en jornadas educativas para los pobladores de Montes de María que viven en zonas con riesgo de deforestación, con la intención de recuperarlas. Sin embargo, apuestan por replicar su trabajo en otras zonas del país con una red de voluntarios dispuestos a realizar, por ejemplo, recolección de semillas y siembra extensiva de plantas nativas.
Deportes acuáticos para cuidar el mar
Amigos del Mar surgió como una idea de Pedro Salazar, un habitante de Tierra Bomba, quien, preocupado, veía cómo los turistas llegaban hasta la isla que ha habitado por años y, luego de disfrutar, se iba sin pensar en los desechos que dejaban tras de sí. Ideó entonces esta fundación que promueve el turismo, sí, pero con un añadido: quienes van, participan en jornadas de limpiezas en la playa y en el mar.
“Reforzamos un pensamiento ambiental y la lucha por un entorno sin basura. Con nuestra iniciativa liberamos, por un lado, los océanos del plástico y otros residuos, e impulsamos, por otro lado, el sentido común y el aprendizaje sobre la importancia de cuidar el medioambiente y reciclar”, explica Pedro.
Por la defensa de Santurbán
Vanessa Durán, presidenta de la Plataforma LGBTIQ de Santander, es enfática en algo. Aunque su organización promueve los derechos de las personas diversas, insiste en que la protección del medioambiente es un asunto de todos. En el caso suyo, este cuidado tiene que ver con la defensa del páramo de Santurbán, donde existe la posibilidad que se realicen proyectos de minería a gran escala.
“El medioambiente es un tema transversal que nos involucra a todes, sin consideraciones de edad, clase o creencias. Y este es el momento de actuar”, dijo Vanessa a la WWF. Para tal fin, realizan jornadas de limpieza, así como de educación sobre el cuidado del páramo, dictadas por personas que, como las demás integrantes de la plataforma, lo hacen de forma voluntaria.