Los 5 colombianos con más espíritu navideño en el país

Colecciones de nacimientos, un pesebre comestible y una casa decorada con 15 mil bombillos son algunas de las curiosidades navideñas de estos colombianos.

1. El Párroco que colecciona pesebres en Cali

El Padre José Eugenio Hoyos ha conseguido sus pesebres por medio de su labor como misionero, también se los han regalado o los ha comprado durante sus viajes. / FOTO: cortesía de la Pastoral Social de la Arquidiócesis de Cali

El Padre José Eugenio Hoyos, director de la Pastoral Social de la Arquidiócesis de Cali y párroco de la Inmaculada Concepción, considera que cada pesebre representa la historia y la cultura de cada país, por eso, cuenta con una colección de casi mil nacimientos, los cuales ha obtenido en países africanos, europeos, norteamericanos y suramericanos.

Los viene recolectando hace más más de treinta años, siendo el primero de ellos un nacimiento elaborado en guadua por una comunidad indígena en El Salvador, que se lo obsequió cuando estaba haciendo su labor como misionero en el país.

Entre su colección hay pesebres de arcilla, vidrio, madera, cerámica, papel, tela, cartón y metal. Hay unos con las imágenes mayormente aceptadas de María, José y el Niño Dios, pero también hay nacimientos donde se les representa como individuos de una comunidad arahuaca o como miembros de una tribu africana.

Los pesebres en este momento se encuentran expuestos en la Inmaculada Concepción, en Cali, donde permanecerán hasta la segunda semana de enero del 2023.

2.El chef que hizo un pesebre comestible de 9 metros en Floridablanca, Santander

El pesebre estará expuesto hasta el 9 de enero. Luego será fundido y el melado será entregado a los campesinos locales, para que lo usen para alimentar a su ganado. / FOTO: cortesía de Dulce la oblea

Hace 10 años Cristian Mauricio Jiménez, empresario y pionero de Dulce la oblea, en Floridablanca, Santander, tuvo la idea de crear un pesebre comestible. Con ayuda de su esposa, su cuñado,  hijos y algunos amigos, buscó la manera de hacer cada figura y elemento del nacimiento con dulce.

El pesebre de hace una década midió un 1.10 metros de ancho por 2.50 metros de largo, pero con el tiempo la creación se fue a dando a conocer, se convirtió en una tradición anual y el pesebre comestible del presente año mide 2.50 metros de ancho por 9.5 metros de largo.

“Tiene aproximadamente 700 libras en productos dulces típicos de la región, como el dulce de apio, de sidra, de arroz cortado, las obleas, el merengón, el mazapán (con el que crear las figuras), entre otros”, comenta él.

Como todos los años el pesebre dulce tiene un nombre y un mensaje, el del 2022 con sus techos de chocolate, murallas de panelita y arena de azúcar, se llama Colombia en un pesebre.

“Quisimos representar muchas partes de Colombia como la Ciudad Amurallada de Cartagena, el pueblito paisa, la zona cafetera, el Pacífico colombiano, los indígenas de la Sierra Nevada de Santa Marta, Santander y Floridablanca”, explica Jiménez, quien junto a su familia tardó dos meses en hacer el postre.

Con el pesebre dulce de este año lograron reunir a la comunidad y a 13 expositores de las veredas y los barrios de la zona, quienes llevaron un pesebre para exhibirlo y una lista de 30 niños de su territorio a quienes Dulce la oblea entregará un regalo en esta Navidad.

3. La casa más iluminada de Medellín

Así se ve la 'Casa de los Juanchos', como es conocido el lugar en honor a Juan Antonio Rendón, padre de Humberto Rendón. / FOTO: cortesía de Humberto Rendón

Desde hace 46 años, en 1976, se empezó a gestar en la casa de Humberto Rendón González una tradición navideña que se mantiene hasta la fecha, la de decorar su fachada del lugar hasta convertir su hogar en el más iluminado de Medellín.

Con la ayuda de los cinco hermanos con los que vive, y la colaboración de uno de sus amigos más cercanos, Juan Carlos Gómez,  Rendón montó en más o menos unos 20 días los 15.000 bombillos que en las noches hacen detener a los transeúntes que recorren el barrio La Floresta, para poder admirar el alumbrado de la casa, algo con lo que Rendón se siente muy orgulloso.

“Desde el año 2000 el alumbrado tomó más relevancia, porque la mayor ilusión de mi padre era poder ver la casa totalmente iluminada, algo que nunca fue posible porque falleció precisamente ese año. Por esta tradición tomó más fuerza y empezamos a realizarla en honor a mi padre”, cuenta Rendón.

Espera que, cuando él ya no esté, esta tradición la sigan realizando sus hermanos y sus sobrinos, ya que sus hijos viven fuera del país.

“Para mí la Navidad es una pasión, una combinación de luces y colores para disfrutar con la familia y los amigos”, considera él.

4. La dueña de más de 2000 pesebres de Medellín

La exposición estará abierta al público en el centro comercial Unicentro Medellín hasta el 9 de enero. / FOTO: cortesía de Olga Lucía Londoño

En octubre del año pasado Olga Lucía Londoño heredó de su hermana una colección de 2.600 pesebres y la tradición de exponerlos anualmente en Medellín, para llevar a los antioqueños la magia de la navidad.

“En el tiempo que mi hermana estuvo viva siempre buscó tener una de las casas más decoradas de Medellín. Sacaba todos sus nacimientos y los adornaba con piedra, musgo y arena. Al morir, ella me dejó como legado sus pesebres, los cuales actualmente se están exponiendo en el Museo del castillo y en Unicentro”, comenta.

Adicionalmente, como se están cumpliendo 800 años desde que San Francisco montó el primer pesebre en Italia, los padres franciscanos le comentaron que desean hacer una exposición que dure todo el año. Por eso 170 nacimientos de la colección estarán exhibidos en la Universidad de San Buenaventura durante el 2023.

“Mi hermana se enamoró de la Navidad después de hacer su primera comunión, que fue cuando le regalaron su primer pesebre. Además, al vivir en una familia de 14 hermanos en mi casa siempre se festejaba la Navidad por lo alto. Por eso en ella fue creciendo paulatinamente el espíritu navideño, el cual se vio reflejado en su colección de pesebres de todo el mundo”, recuerda ella.

Como las hermanas vivieron juntas durante 31 años y Olga siempre la ayudó a montar sus exposiciones, continuar con esta tradición es un honor para ella pero desconoce si a futuro podrá continuarla.

“En este momento yo quisiera seguir con el proyecto de mi hermana, de brindar clases a la gente para que aprendan a hacer pesebres, de abrir un espacio donde se haga un traspaso generacional de costumbres entre los adultos mayores y jóvenes y también donde los artesanos puedan hacer su trabajo, pero económicamente es muy difícil encontrar apoyo”, cuenta. 

Actualmente seguirá con las exposiciones, demostrando la variedad cultural que se refleja en cada nacimiento.

5. El director de teatro que hizo una obra navideña para presentar por toda Caldas

Para Alex Hernández Márquez, director de teatro del grupo Alas De Trapo, la Navidad es “una de las épocas más bonitas del año”, porque brinda la oportunidad a las personas de compartir con su familia, hablar de perdón y también de reconciliación. 

“Desde que soy niño para mí esta ha sido una época maravillosa, en la cual no sólo busco compartir con mis seres queridos, sino que también celebro con toda la energía”, comenta él.

Con la intención de esparcir y avivar en los caldenses y los colombianos el espíritu de la Navidad, Hernández decidió escribir una obra de teatro musical navideña, por medio de la cual también pudiera brindar, en el proceso, un mensaje pedagógico que este año se centra en el regalo del amor.

“La Navidad no sólo se convirtió en un momento donde viajo por Colombia con mis obras, sino también en una época donde puedo compartir mi alegría con personas que quizás nunca han tenido la oportunidad de ver una obra teatro musical navideño. La invitación siempre será a dejarse contagiar por el espíritu y la magia de la Navidad. Por la oportunidad de celebrar un año que termina, pero también de recibir uno nuevo lleno de cosas más bonitas para cada uno”, aclara Hernández.

La gira del presente año se realizó por casi todos los municipios de Caldas “para alegrar un rato los corazones de los niños, niñas y todas las familias que participan como público”, y también llegó a Antioquía, Chocó y Risaralda.

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