Memorias vivas del Urabá y el Darién: turismo comunitario para resignificar el territorio
En el Urabá, un grupo de mujeres resignifica el territorio a través del turismo comunitario, mostrando su riqueza cultural y ambiental.
En el Urabá, un grupo de mujeres resignifica el territorio a través del turismo comunitario, mostrando su riqueza cultural y ambiental.
En una región marcada por el conflicto y una memoria olvidada, nació Champa Mía, una iniciativa de turismo comunitario que recorre el río Atrato.
En Bogotá, AsoSandiego tomó el destino de su entorno en sus manos. Una asociación que, con el tiempo, se convirtió en un modelo de gestión urbana ejemplar.
Este proyecto familiar busca acercar a niños, jóvenes y familias a la vida rural y al origen de los productos agrícolas.
En María La Baja, la memoria, la naturaleza y la cultura narran una historia de transformación a través del turismo comunitario.
La comunidad de María La Baja visibiliza los ecosistemas locales, promueve su conservación y revela historias de resiliencia.
El departamento del Cauca, asociado a la violencia y el conflicto, abre camino hacia una nueva perspectiva a través de iniciativas de turismo comunitario.
Los habitantes de este Punta Soldado desafiaron al mismísimo océano. A pesar de la erosión costera, se convirtió en un modelo de turismo sostenible.
En San Cipriano, la comunidad creó un medio de transporte para cruzar la selva. Quienes lo emplean descubren un paraíso de enorme riqueza natural.
En Buenaventura, un viaje mar adentro y un encuentro lleno de emoción, promete la posibilidad de presenciar el salto de las ballenas.